Hay quienes lo han nombrado como el año en que vivimos en peligro. Bravo el 2020: un período donde parecía que teníamos más tiempo libre, pero no. Época de sentirnos solxs aún cuando plagadxs de compromisos virtuales, contábamos con variopintas compañías. Un tiempo en el que los días pasaban volando o demoraban años. Así el año se fue.
Se nos vino el 2021 mientras en El Chasquido se nos disparaba energía en múltiples direcciones. Un inicio donde llovían aportes espontáneos y, a la vez, nos faltaban aquellos que solicitábamos. Enero pasó por nosotrxs como un remolino donde se entremezclaban voluntades, imágenes, textos. Enero nos pescó “en ojotas”
Nada es casual, nos dijimos.
¿Estaremos signadxs por la geografía del barrio?
Un laberinto donde vernos, confundirnos, aclararnos, mirarnos a los ojos y volver a andar. Algo así como este número que pudimos gestar.
Nada es casual, insistimos.
¿Cuánto quedó en el tintero? ¿Cuántas “noticias” se nos escaparon?
Somos conscientes que hasta lo que no pudimos cubrir está en nosotrxs. Por eso, desde la editorial celebramos la sanción de la Ley de interrupción voluntaria del embarazo. Por eso, también, brindamos por la llegada de las primeras vacunas. Nos debemos un registro y reflexión acerca de estos procesos.
Nada es casual, volvimos a decir.
¿Estamos algo dispersxs y desorientadxs?
Convencidxs estamos de que ante la desorientación el pasado ayuda a construir sentidos. De ahí las notas acerca de la Historia. De ahí, las historias de vida que nos mecen como en los buenos recuerdos de la infancia.
Ojalá así se sientan: recuperando lo que fuimos mientras vamos siendo lo que somos frente a lo incierto de lo que será.
Queridxs lectorxs: … les invitamos a descubrir este número que salió así: en ojotas.
Parque Chas, 17 de Febrero de 2021